What if you should decide that´s you don´t want me there by your side? || Paris Blanchet

Recuerdo del primer mensaje :

Y en un abrir y cerrar los ojos las cosas ya no eran como antes, pasar tiempo en la fraternidad me era difícil ¿como afrontas algo así? Yo no he logrado comprenderlo en mis 20 años de vida, he perdido dos mejores amigos y un hermano y solo no logro asimilar siquiera nada. Pero esta vez no estoy sola, Paris ha estado a mi lado y solo hace la carga un poco menos ligera, me cuenta tonterías e incluso las hace para hacerme sonreír y tiene tanto poder sobre mi, que lo logra. Ademas sus besos y caricias solo hacen que me concentre en él, y claro sus abrazos no hay algo mas reconfortante en el mundo que estar entre sus brazos. Ha sido una buena noche, estar solos en su casa creo que me relaja un poco y por momentos solo hace que me olvide un poco de todo el caos que ahora ronda mi vida.

Hace ya un rato que he despertado y él ya hasta volvió de su pequeña ronda de ejercicios matutinos, lo veo acostado a mi lado, se que no esta dormido pero sus ojos están cerrados, me levanto rápidamente para ir al baño y lavo mis dientes, al regresar a la cama solo salto sobre él, supongo que un poco de todas esas energías que he malgastado están volviendo. -Hola Panda. - digo rodeando su cuerpo con mis piernas y poniendo mis brazos alrededor de su cuello, para solo acercarme y darle un corto beso. Solo quedando lo suficientemente cerca de él para mirarlo un poco. -Tengo hambre. - algo que realmente resulta en una sorpresa para mi, pues los últimos días mi apetito no ha sido el mejor, pero hoy solo creo que las cosas pueden mejorar, y es gracias a él. Logra hacer que las cosas por mas difíciles que sean pueda superarlas.

Siento como me aprieta contra él, y muerdo un poco su hombro. -Te comeré si no me alimento pronto. - digo dándole un par de mordidas más. -Sabes bastante bien, así que creo que lo haré. - digo comenzando a jugar un poco, no se desde cuando solo no me sentía tan bien, pero presiento que hoy sera un gran día.

Abro los ojos y termino con mi pequeña actuación y mi ceja se levanta al escuchar lo que ella dice.
-si tal vez les gusto un poco-- digo dándole la razón pero tratando de restarle importancia -creo que mandaré a construir algo ahí- digo mirando el punto donde se podría bloquear la vista de mis curiosos vecinos -o comprar otra casa- comento como si pudiera hacerlo solo así como así, no soy rico, y nunca le pediría dinero a los Blanchet, aunque ellos digan que me costearían una casa mas grande.

-JA JA... eres tan divertida amor- digo con obvio sarcasmo y la veo como intenta ponerme aceite en el abdomen.
-ven aca- digo cuando ella dice lo del masaje y vuelve a mencionar a esos sujetos. Mis brazos jalan para que quede acostada encima de mi y comienzo a besarla -quiero entrar a la alberca- le digo cuando me separo de ella y me levanto del camastro con ella en brazo, es un movimiento un poco complicado pero aun así lo logro y solo camino a la alberca -el agua estará un poco fría -digo como advertencia y simplemente nos dejo caer dentro mientras la vuelvo a besar.

Paris hace que pierda tan fácil el hilo de mis pensamientos con sus labios yo ni siquiera recuerdo que era lo que tanto me preocupaba hace un segundo, escucho su comentario de la alberca, que justamente era la idea principal que teníamos y luego solo todo se distorsiono, siento como intenta ponerse de pie, y como ya se que no dejara que yo solo me ponga de pie, me adelanto y rodeo con mis brazos su cuello. Cuando veo que ya está cerca de lanzarse solo tomo un poco de aire pero de nada sirve pues el se apodera antes de mis labios, solo ha hecho que la caída sea perfecta.

Y efectivamente el agua es fría, a pesar del clima cálido que hace, pero creo que en este momento lo de menos es la temperatura, mis piernas rodean su cuerpo y mis brazos sus cuello, mientras solo lo beso disfrutando el ritmo con él que lo está haciendo, supongo que estaba un poco necesitada de él de su contacto, de su calidez, los últimos días solamente me superaron de tantas formas que simplemente lo deje de lado, había sido solo un alma en pena, y no se porque eso cambio, pero ahora se siente mas como yo, tengo esas ganas de vivir de siempre, y sobre todo esas ganas de estar con él que en ves de reducirse con el tiempo, solo parecen acrecentarse.

Suena a todo un cliché pero solo siento que conforme el tiempo avanza me enamoro de mas formas de Paris, algo extraño pues hace un par de meses aunque volvíamos a estar juntos nada era como solía ser, y ahora incluso siento que es mucho mejor.

Cuando dejo que caigamos en el agua, me giro un poco para ser yo quien reciba el impacto, y luego solo la beso, me deleito con sus labios mientras nos sumergimos, y luego de unos segundos solo intento que salgamos a la superficie, pues no hemos tomado suficiente aire, al salir me separo de ella por esa necesidad involuntaria que uno tiene cuando sale del agua buscando aire, y luego de escurrir el agua de la cara con mis manos la miro. Aun cuando lleva solo esa camisa mía puesta, la imagen que me brinda es simplemente perfecta, una completa intensión.

-refrescante- digo sin poder ocultar la obvia mirada que tengo para ella en este momento -muuuuy refrescante -vuelvo a decir -¿aun te interesa invitar a los vecinos?- cuestiono con tono sugerente mientras busco pegar mi cuerpo al de ella y beso su oreja pasando con descaro mi lengua para culminar con una una suave mordida en la parte mas alta de su oreja. Luego me alejo para poder mirar su cara y sonrío. La levanto para que me rodee con sus piernas, estando en el agua es una tarea demasiado fácil y la acorralo contra la orilla de la alberca -tengo una duda Zoe Kavanagh, ¿hoy ya te he dicho lo perdidamente enamorado que estoy de ti?- la miro un poco divertido, extrañaba tanto ver su sonrisa, que simplemente me siento tan feliz de verla mejor.

Supongo que solo me he emocionado cuando se separa de mi, solo aspiro con fuerza para tomar aire y arrojo mi cabello tras de mis hombros escuchando como gotea un poco. -No ya no, que no quiero compartir con absolutamente nadie. Nunca, con nadie. - y me dejo llevar por ese beso que da en mi oreja, el solo me desarma tan fácil, yo ni siquiera pongo un poco de resistencia.

Mis piernas vuelven a rodearlo y mis brazos se envuelven en su cuello de nueva cuenta, sintiendo como mi espalda golpea el concreto de la alberca. -¿Ah si? ¿Qué tanto es perdidamente? - digo solo evitando besarle por un par de segundos echando mi cabeza un poco para atrás, aunque en la posición que estamos el solo tiene el control de todo. Y sonrió cuando nuestras miradas se cruzan, solo es imposible no amarlo cuando el es tan dulce conmigo. -¿Yo te amo sabes? - digo recargando mi nariz en la suya, sintiendo como su cabello escurre un poco sobre mi rostro. -No se que haría sin ti. - digo rompiendo ahora si la distancia entre nuestros labios, pero por extraño que parezca mi beso es lento y bastante mas dulce que los que suelo darle, creo que la realidad es que tengo un poco de miedo de solo perderle, de que algo malo pase y el solo termine llendose de mi vida como Reed lo hizo, como lo hizo mi hermano y como Noah lo hizo antes que ellos. Solo no quiero perder a nadie mas que sea importante.

-entonces no habrá invitados- declaro un poco orgulloso de mi, se que en realidad no invitaríamos a nadie, pero aveces solo por molestar a ella le encanta llevarme la contraria, y tener estas pequeñas “victorias” me bastan.

¿Como le explico cuanto la amo? Hasta el punto de detestar mi vida cuando no estas en ella... si digo eso seguro recordará lo que le conté sobre aquellos días, y no quiero que se sienta culpable de nada. Pero es la verdad, sin ella en mi vida yo perdí el rumbo, no deseaba nada mas que a ella, no extrañaba nada mas que a ella. Ahora mismo no tengo una manera mas poética o romántica de explicarle lo mucho que la amo.
-tanto que ni siquiera se como expresarlo, y sabes que soy muy bueno con las palabras- digo dejando un beso en su mentón cunado hace la cabeza hacia atrás -lo sé- respondo sin dudar, si, no negaré que alguna vez me sentí inseguro al respecto, pero se que ella me ama, tal vez hubo obstáculos en el camino, obstáculos que han dejado una gran cicatriz en mi corazón, pero ya no quiero, no, ya no puedo dejar que eso afecte nuestra relación, yo mismo me he encargado de que nuestra felicidad se viera mermada.

Disfrutamos un poco del tiempo en la alberca y ya ni siquiera presto atención si tenemos o no espectadores, solo quiero amarla todo el tiempo que me sea posible. Mi mano busca la suya por el agua han comenzando a tener ese aspecto arrugado.
-¿crees que deberíamos salir?- pregunto pasando las yemas de mis dedos por su cara en un intento de molestarla.

Que Paris diga que no tiene palabras para algo simplemente es difícil, si bien es verdad que es serio, conmigo no suele serlo, pero mas que eso, siempre suele ser bueno expresándose, y por lo regular encuentra las palabras perfectas para decir las cosas. Así que supongo que debería sentirme feliz. -No se si debo sentirme halagada, o asustarme por eso. -

Ya tenemos un buen rato en la alberca, lo que parecía haberse arruinado por nuestros espectadores solo terminamos por ignorarlos, y escucho su pregunta. -Ya deberías estar acostumbrado a verte arrugado abuelo. - digo sin separarme de él, y mordiendo juguetonamente su labio.

-Está bien vamos, pero promete que veremos una película y no te dormirás. - digo poniéndoselo como un reto, pues aunque siempre terminamos viendo películas, se que el no lo dice, pero tengo claro que el cine no es una de sus mayores aficiones, la mayoría del tiempo el solo prefiere verme a mi que a la televisión, aunque siempre logro encontrar alguna que pueda ser de su total agrado. Me levanta y me deja sentada al borde de la alberca para luego salir de la alberca y me ayuda a ponerme de pie, nos secamos, pues las toallas ya estaban en el jardín, para luego solo levantarme en brazos como ya es su costumbre. -Estoy pensando seriamente en apodarte príncipe o algo por el estilo. - digo encogiéndome de hombros. -podríamos ver algo de disney. ¿Qué princesa sería? Tu no te pareces a ninguno de esos feos príncipes. Creo que incluso ninguno de ellos nunca te igualaría. - digo rodeando su cuello, con el tiempo me he acostumbrado a que solo haga eso, así que ahora cada recorrido en el que me encuentro en sus brazos suelo disfrutarlo. -Te amo.- digo moviendo un mechon de su cabello que aun gotea en su rostro.

-por supuesto que deberias sentirte asustada, tal vez aterrada- obviamente lo que digo es broma, pero creo que podia ser un poco cierto, incluso yo mismo he tenido miedo de este amor que tengo por ella, un amor tan intenso y salvaje, el cual no he sabido controlar cuando experimento el miedo de perderla.

Entrecierro mis ojos y la miro acusadoramente para culminar mi comportamiento sacando mi lengua.
- te encanta este abuelo, aunque este tan arrugado como tu- digo indignado y robo un fugaz beso a sus labios.

-lo intentare - digo ante su respuesta, no es que no me guste ver películas, pero simplemente es algo de lo que puedo prescindir. Solía solo ver las que estabn en cartelera y luego de eso quedaban en el olvido. Hora con Zoe he visto tanta películas, unas realmente muy buenas eso es innegable, pero aún así no es como si ahora fuera un fanático del cine.
La ayudo a salir del agua y luego lo hago yo. Me seco un poco y con ella en brazos camino a la casa.
- ¿príncipe? Me sigue gustando mas panda- argumento pero supongo que aún así ella me dirá como quiera si es que se le antoja.
- tu sin duda la bella durmiente - digo en broma ma que nada, y creo que es obvio el porque se lo digo -yo a ti.

Lugo de subir a la habitación y ponernos un poco de ropa seca bajo a la cocina para preparar una botana mientras ella elige la película y nos acomodamos para ver la película pero no se si podré cumplir el no dormirme, pues luego de un rato comienzo a sentirme cansado y sobretodo relajado.