Paris Blanchet ID

Es todo un caballero, educado y atento cuando se lo propone, pero también puede ser demasiado sarcástico y desconsiderado e incluso ofensivo con las personas. Raramente inicia una conversación con alguien desconocido a menos que la otra persona le hable primero y si el o ella no le parece agradable no le interesa mantener relación alguna. Le gusta salir con chicas, aunque rara vez mantiene una relación medianamente seria con alguna, a pesar de eso ellas se siguen mostrando interesadas y algunas incluso terminan siendo buenas amigas de él.
Nunca lo admitiría frente a nadie, pero es bastante arrogante y vanidoso.
Es un chico serio y reservado, por ello mismo aveces lo catalogan de frío e indiferente. Le desagrada la gente escandalosa e irrespetuosa, al igual que las personas que no respetan los gustos de los demás. Detesta ser impuntual casi tanto como no soporta a las personas fatalistas y dramáticas que gustan de hacerse las víctimas. Prefiere escuchar a las personas, pero también es un gran conversador. No suele entregar su confianza absoluta a nadie, pero es muy leal a sus amigos, con los cuales suele ser carismático, bromista y hasta deja salir ese lado tierno e infantil que a pocos deja ver. Es adoptado y aunque no lo diga a sus padres, siempre se sintió un poco mal por eso, ya que si recibía algún trato especial por parte de ellos pensaba que lo hacían porque era adoptado y no por verdadero amor de familia. Por ello siempre trató de ser independiente para quitar cualquier cargar que ellos pudieran sentir.

Fue adoptado por la familia Blanchet a los pocos meses de nacido, ya que estos no habían logrado tener un hijo propio.
Desde que tiene memoria sabe que no es hijo de sangre de los Blanchet, aunque no era algo que pudiesen ocultar pos los rasgos físicos del pequeño Paris, en el cual predominaban las características orientales tales como ojos rasgados, cabello negro y lacio.
Sus padres se mostraron interesados en que el pequeño Paris aprendiera diversas artes, centrándose principalmente en la música aprendiendo asi a tocar el piano, la bateria y a cantar.
La mayor parte de su infancia la paso viajando con su familia ya que su padre es arqueólogo hasta que le ofrecieron un trabajo como investigar de una universidad de Londres, teniendo por fin un hogar fijo.
Cuando tenia unos 4 años llegó a la familia la pequeña Maya, el bebe que los Blanchet habían buscado por tantos año. Al principió a Paris le desagrado la idea de tener una hermana mas aun siendo ella hija de sangre, pero, poco a poco se fue encariñando con ella y con ello creció la necesidad de protegerla de sobremanera.
Ya en la adolescencia, buscando maneras de cambiar su comportamiento y sentimientos confusos por su hermana, encontró la fotografía que se volvió un pasatiempo durante la mayoría de esos años al igual que la música y así cuando llegó el momento supo que era lo que quería estudiar y que lo haría lejos de su familia y sobre todo de Maya y se fue a Ucla en donde se sintió identificado con la fraternidad de Omega Eta donde encontró cierta tranquilidad.

Al llegar a Ucla Paris no se sentía interesado por entrar a ninguna fraternidad pero al final termino conociendo Omega Eta, donde encontró personas agradables que le brindaron su amistad y compañía logrando así encontrar ahí cierta calma y tranquilidad, distrayendo su mente de recuerdos y de su familia.