Kirstine I. Dowland

   A simple vista cuando se ve a Kirstine, la primera impresión que se puede tener es la de una  “chica estándar de clase alta", engreída, frívola y carente de una opinión verdaderamente propia, pero... las apariencias engañan. En cuanto la escuchas hablar, aunque sea durante diez segundos, todo en ella denota lo contrario.
De las frivolidades pasa completamente, ella no se conforma con lo sencillo, tiene esa constante necesidad de "más" que la impulsa a sobrepasar la superficie de las cosas y a buscar constantemente, el por qué, el cómo y el cuándo de todo. Esa eterna persecución de un sentido a cada situación o persona, la lleva a ser bastante intensa, testaruda y también abierta en cuanto a conocer otras realidades, ya que según ella de lo diferente se nutre, y los prejuicios no tienen cabida ya que un ser imperfecto no puede juzgar las imperfecciones de otros.
El segundo adjetivo fácil de descartar al escuchar sus palabras es la autenticidad, Kirstine puede tener un millón de defectos, pero nunca se podrá tachar de alguien falto de personalidad propia, auténtica. Ella y su mente son todo un universo, uno bastante complejo, en el que las reflexiones abundan, tiene una propia filosofía y manera de ver el entorno que la rodea y en su cabeza la idea de que este mundo podrían ser diferente si todos se lo propusieran, está marcada a fuego, por tanto, intenta contribuir porque cree que si todos dan un poco de sí, el mundo podría ser un lugar mejor. Es idealista y no lo niega. Defiende sus creencias con uñas y dientes porque por utópicas que sean, ella en verdad las cree, y no le interesa en lo más mínimo lo que opinen los demás (es bastante "rebelde").
Dentro de sus máximas, la igualdad es un punto fundamental, para ella no hay seres mejores ni peores tan solo diferentes y todo es “bueno o malo” según desde donde se mire. Al hablar de igualdad también es importante destacar que actualmente está algo obsesionada con la igualdad de género, cree en la fuerza femenina que aporta la mujer y considera que deben desempeñar roles tan importantes como los que realizan los hombres.
Otra virtud a destacar es que es bastante caritativa, a lo largo de sus escasos años de vida ha realizado varios viajes a distintos lugares, para brindar ayuda y conocer otras culturas, una de sus metas es trabajar en la ONU, por eso optó por cursar derecho en la universidad.
En parte esos viajes y su forma de ser en sí, la han llevado a volverse un persona muy independiente, si bien el pasar económico de su familia es más que bueno, ella no desea depender toda la vida de ellos, ya que “parte de crecer es ganarse las cosas uno mismo”, así que vive con lo que gana realizando algún que otro trabajo en cafeterías de la ciudad o cuidando niños.

Bien, esta sería la Kirsten más  profunda, la más adulta, pero hablemos de su comportamiento, de como es con sus amigos, de sus gustos. Pues, ella es una chica como cualquier otra, adora divertirse, las fiestas, el alcohol, las salidas son cosa habitual. Es sumamente activa, por lo que no es raro verla entrando o saliendo, charlando con gente y demás... Es un ser bastante social.
En cuanto a su carácter suele ser bueno, no es raro verla sonriendo en los pasillos de la universidad a toda hora, su sentido del humor es bastante sarcástico y ocurrente. No es para nada tímida, adora divertirse así que estas dos características unidas pueden convertirla en alguien un tanto temerario.
Con sus amigos y su familia, es afectuosa y fiel, una vez que te brinda su cariño puedes dar por echo que ella estará allí en las buenas y en las malas, pero eso sí, no la traiciones, porque una vez que su confianza se pierde nunca se recuperará.
Esto nos lleva a hablar acerca de sus defectos, además de rencorosa, la muchacha tiene como puntos negativos principales, su gran testarudez y carácter un tanto indomable, cuando se enfada pude volverse sumamente hiriente, y lo que usualmente parece un leve llovizna se vuelve un completo huracán. Su sarcasmo también es un problema aunque un poco más leve, de vez en cuando la bromear puede irse un poco de los límites, pero intenta con todas sus fuerzas no hacerlo.  
En lo que respecta a los hombres, la rubia sabe como usar sus encantos, sin embargo no los desperdicia en cualquier "tipo" que se aparezca frente a ella. Es sumamente selectiva y bastante desconfiada.
   

"El señor  Dowland hizo girar las ruedas de su flamante Marcedes a toda velocidad, sin embargo por mucho que su pié impactaba contra el acelerador una y otra vez, los kilómetros parecían no pasar dándole la sensación de que aquel trayecto sería interminable. Por su parte, La señora Dowland. que iba situada en el asiento trasero, ponía aprueba su memoria intentando recordar con lujo de detalles las indicaciones que su docente de maternidad le había efectuado para el momento del parto, aunque lo único que recordaba era cómo respirar, así que sus ansiedad fue aumentando poco a poco hasta el punto de enloquecer a su ya alterado marido con sus apremiantes exclamaciones para que apurara el paso.
Por fin, al cabo de diez minutos más se encontraron en el estacionamiento del hospital y una enfermera que observó la escena les acercó una silla de ruedas, que inmediatamente condujo por los pasillos de aquel lugar hasta llegar a la sala de partos."

Así fue como nació Kirsten Ines Dowland, segunda hija de la tan renombrada casa Dowland.
La infancia de la niña transcurrió sin ningún suceso destacable, si bien sus padres no estaban mucho en casa, comprendía que ellos simplemente se esforzaban por mantener el negocio familiar a salvo para que ella y su hermano pudiesen contar con todos los juguetes que necesitaban, así que no se quejaba, después de todo tenía su niñera, o como ella solía llamarla "Nanna" y sus días transcurrían en paz, entre juegos y mundos de fantasía.
Por supuesto, como era de esperarse, desde muy temprana edad los jóvenes Dowland recibieron una educación más que satisfactoria, por lo cual a sus seis años de edad la muchachita había leído tres veces más libros que sus compañeros de clase y alentada por "Nanna", sentía una curiosidad tan grande acerca del mundo que la rodeaba, que todo le llamaba la atención y la impulsaba a estudiar y a conocer.
Poco a poco, la niñez fue quedando atrás y los fantasiosos juegos fueron sustituidos por la llegada de la turbulenta adolescencia, donde la el hambre de conocimiento fue haciéndose más y más grande para aquella chica, que ahora también se encaminaba en la búsqueda de si misma. En esa época fue cuando se marcó el "antes y después" de su vida, y esto lo provocó la llegada de Marguerite Turnner su mejor amiga, hija de una agente de seguridad nacional. Marguerite y su madre poseían una visión diferente acerca de su sociedad, en la casa de ambas era frecuente que los debates acerca de temas como el funcionamiento de la política, del lugar que ocupaban las mujeres en el gobierno y la igualdad entre los estratos sociales, ellas no tenían tapujos a la hora de criticar y dar su opinión, y mediante ellas, Kirsten comenzó a conocer otra realidad y a conocerse a si misma, ellas plantaron la "semilla" que germinaría en su pensamiento de hoy en día.
También al ver su forma de vivir, esforzándose por obtener sus pertenencias y por ganarse la vida, aquella muchacha descubrió lo que era trabajar para vivir y también la unión en una familia ya que Marguerite y su madre solo se tenían la una a la otra.
Lamentablemente pese a lo mucho que pelearon, la señora Turnner terminó perdiendo su empleo debido a su forma de pensar diferente y ellas por dificultades económicas optaron por mudarse Londres para pedir ayuda a su familia existente allí.
Meses después, Kirsten se enteró que Marguerite fue asesinada en una de las calles de esa ciudad luego de que una bala perdida impactara con su cráneo, y su mamá cuya salud mental se debilitó tras la muerte de su hija fue trasladada a un hospital mental desconocido.
Todo esto llevó a que la efervescencia contenida en la menor de los Dowland finalmente estallara. A los diecinueve años postergó sus estudios universidad de Yale y se inscribió en un grupo de voluntariado pese a las objeciones de sus padres... Así comenzó a viajar hacia diferentes países carenciados para prestar asistencia. Marguerite y su madre, junto a sus ideales siempre estuvieron presentes y lo están hasta el día de hoy, marcando cada una de sus acciones y pensamientos, ella no había podido ayudarlas, pero intentaría con todas sus fuerzas cambiar las cosas, intentaría que otras "Marguerites" encontraran un lugar mejor.
Hace unas semanas luego de finalizar con esa vida de viajes, regresó a su país natal (Estados Unidos), cogió un trabajo de medio tiempo y se inscribió en la universidad, pese a todo pronostico, ignorando las quejas de sus progenitores (que deseaban que continuara asistiendo a Yale), optó por asistir a UCLA para iniciar sus días de independencia.

Al leer la descripción de las fraternidades en uno de esos panfletos informativos que suelen entregarte cuando eres nuevo, Kirsten inmediatamente sintió un gran fervor en su pecho que la hizo desear ser parte de las Sigmas, el por qué fue sencillo, ellas representaban cada uno de los ideales que en su profunda mente existían. Eran independientes, con un gran interés social y defensoras de la fuerza femenina, líderes natas... ¿Cómo no querer pertenecer a un grupo así cuando las características de su personalidad presentaban tantas similitudes? Sería idiota sino deseaba estar en un sitio donde podría compartir con chicas fuertes que al igual que ella, deseaban ocupar un lugar activo en la sociedad como mujeres independientes y profesionales, poseedoras un alma caritativa con grandes ideales.


   

   Mascota: Un gato llamado Luther (en honor a Martin Luther King)
   Pertenencia más preciada: Un pequeño diario que usa como bitácora de cada viaje.
   Mayor miedo Perder su libertad y la esperanza en la posibilidad de construir un mundo mejor.
   Pareja: No tiene
   Canción que te describe: One - U2
   Otras cosas: -Posee un Volkswagen escarabajo que compró luego de un gran tiempo de ahorro.
  -A demás de ingles, sabe hablar un poco de francés, alemán y portugués debido a sus viajes.
  -Colecciona estampillas de los países en los que ha estado.
  -Es alérgica a las nueces