Destroy. | Bellamy Carter

Sus planes para aquel sábado se resumían en lo siguiente: quedarse en la casa omega viendo una maratón de alguno de sus programas favoritos mientras comía helado hasta que le diera un subidon de energía. O al menos ese había sido su plan hasta que había recibido un mensaje de su otra mitad. Sonrió levemente y no dudo en responderle con un: "Por supuesto que si Pinky." Rápidamente se levanto de la cama y se vistió con uno de esos vestidos veraniegos que estaban en su armario, el verano podía haber acabado pero en California siempre era verano. Tomo lo esencial y lo metió en su pequeño bolso para luego salir de la casa omega con dirección al muelle donde sabia que su amiga estaría esperando por ella. Conocía a Cynthia y sabia que aquello no seria solo una tranquila tarde en el muelle, siempre podía contar con la rubia para hacer alguna pequeña travesura y aunque terminara en serios problemas después de eso no le importaba porque se había divertido como nunca.

Bajo del taxi que la había dejado en la entrada del muelle y arreglo su vestido para luego colocarse sus lentes de sol. Comenzó a caminar, buscando con la mirada a la rubia hasta que la vio a solo unos metros de donde se encontraba por lo que acelero el paso. Le devolvió el abrazo con una sonrisa. —Oh que tienes en mente Cyn, tus planes pueden ponerse un poco descabellados —comenta con una ceja enarcada, aunque fuera lo que fuera estaría segura que le diría que si, no podía decirle que no a Pinky. Se muerde el labio un poco nerviosa mientras su amiga va contándole su plan. Había hecho cosas locas en su vida, pero "tomar prestado" un yate no había sido una de ellas, estaba mas preocupada por el hecho de que se trataba de algún yate de algún Epsilon mas que nada, no quería ni imaginarse que pasaría si el dueño se enteraba que habían tomado su yate. Sigue a Cynthia hasta que quedan enfrente del impotente yate, para luego volver a girar su mirada hasta la rubia. —¿Estas segura de esto? Mira que no quiero tener que estar tratando con ningún toro enojado luego de esto —admite cruzándose de brazos, todavía mordiéndose el labio. Suelta un suspiro y se encoge de hombros, solo se vivía una vez, ademas no había nadie cerca que pudiera decirle algo. —Oh que diablos, vamos antes de que mi parte racional me diga lo contrario —niega la cabeza con una risita y con un movimiento de cabeza le hace señas a su amiga para que vayan hasta la entrada del yate.

Bueno no podía quejarse, había estado deseando que aquel día pasara algo emocionante y Cynthia le había dado emoción a su día. Solo esperaba que no terminaran en la cárcel o algo parecido; si su abuelo se llegaba a enterar de lo que estaba haciendo lo mas probable es que la mandara de regreso a Australia con sus padres sin chistar. Una de las pocas reglas que le había dado cuando llego a su casa había sido nada de vandalismo; pero técnicamente ellas no estaban robando aquel yate, solo lo tomaban prestado... Cynthia era amiga del tal Dorian aquello debía de ser suficiente en su defensa o al menos eso esperaba. Sacudió la cabeza para sacar aquellas cosas de su mente, había ido ahí a divertirse no a preocuparse de lo que podría pasar luego. Esperaba que su amiga supiera lo que hacia porque ella por su parte no tenia ni la menor idea de como manejar un yate. Las personas de dinero normalmente solían tener varios yates y enseñar a sus hijos a como manejarlos y la familia Carter no había sido la excepción pero Bellamy había estado demasiado drogada durante aquellos viajes al mar con su familia que normalmente se quedaba en el camarote fingiendo que estar en la parte superior del bote la mareaba demasiado.

Una vez dentro del yate se pone a observar todo a su alrededor. Definitivamente era un poco mas grande que el que sus padres poseían y mas moderno también pero en definitiva seguía siendo tan hermoso como el que los Carter tenían. Estaba por caminar hasta al frente cuando escucho la voz de Cyn a sus espaldas y se giro para ir hasta donde su rubia amiga estaba. La encontró en la cabina de mando e inclino un poco la cabeza. —¿Estas segura de que sabes manejar esta cosa? No quiero terminar perdida en medio del océano —ríe. Saca su celular que traía en su bolso y le toma una foto en el momento en que se pone el sombrero de capitán. —Oh si muy sexy mi capitán —suelta un par de risas y vuelve a guardarse el celular. Se queda apoyada en una de las paredes de las cabinas hasta que su amiga deja todo en orden para que ellas puedan disfrutar de aquel yate. Se encoge de hombros aunque en aquel momento su estomago ruge indicando el hambre que tenia en aquel momento. Se sonroja levemente. —Esta mañana no desayune... solo había brownies en la casa omega —obviamente aquellos brownies no eran unos dulces cualquiera. Incluso se había traído unos con ella, si las cosas se ponían un poco aburridas en el yate podrían comer un par de ellos para alegrarse. —Vamos a comer en la proa, con un poco de suerte quizás pase otro yate —mueve las cejas rápidamente y toma la mano de Cynthia para que comience a caminar con ella. Era bueno que la rubia hubiera pensado en traer bikinis con ella porque a la castaña no se le había ocurrido traer ninguno a pesar de que se dirigía al muelle.