Los exs son como los champiñones, aparecen de la nada {Blake}

Tercer día en el lago y June por fin se había puesto en plan deportiva. Desde que había llegado solamente había hecho el vago y había pensado solamente en divertirse pero necesitaba hacer ejercicio tanto como necesitaba comer cosas dulces. El cielo estaba nublado, lo que hacía que la sensación de calor resultase asfixiante. Pero eso a la rubia no le importó. Había decidido hacer deporte esa tarde y el calor no se lo iba a impedir. Se puso sus deportivas de correr, pantalones cortos de deporte y camiseta blanca al estilo nadador. Su pelo estaba recogido en una coleta alta, algunos mechones caían acariciando su rostro. Se puso los auriculares y con la canción It's my life de Bon Jovi salió corriendo en dirección al bosque.
No tardó en llegar y no pudo evitar sonreír al sentir el frescor del lugar, además verse rodeada por todos esos árboles consiguió hacerle sonreír. Siempre le había encantado la naturaleza y al haberse criado en una gran ciudad la valoraba mucho. Y disfrutando del aire fresco, de la sensación de sus músculos calentándose ante cada paso y del sonido de la música siguió corriendo, adentrándose cada vez más en el bosque, sin fijarse demasiado por donde iba.

Llevaba poco menos de una hora corriendo cuando sin darse cuenta chocó contra alguien y a punto estuvo de caerse hacia atrás pero consiguió mantener el equilibrio. ¿Por qué me choco tanto con la gente? Se preguntó a si misma mientras alzaba el rostro para mirar a la persona con la que se había chocado. Iba a disculparse pero la sorpresa que sintió al reconocerle se lo impidió - ¡Blake! - exclamó entre alegre y sorprendida. Si Ryder había sido su primer amor, Blake había sido su primera vez y el primer chico al que llamó novio - Vaya estás más guapo de lo que recordaba - le dijo sonriendo. No esperaba encontrárselo en un lugar como ese. Era su ex novio pero a diferencia que con el otro con él no se llevaba mal, había terminado como amigos.

Ella sonrió cuando él la reconoció. Habían pasado casi dos años desde que él se tuvo que marchar a Londres. En el ambiente no había tensión ni incomodidad, eran como dos amigos que se ven después de mucho tiempo. Sonrió por lo de hermosa - Veo que sigues igual de halagador que siempre - dijo mientras le correspondía el abrazo. Y entonces se dio cuenta de que él chico no llevaba camiseta, no pudo evitar reír - Pero no recuerdo que fueras un exhibicionista - dijo mientras con su dedo índice le daba un golpecito en el pecho. No le molestaba que él fuese desnudo de cintura para arriba, mejor para su vista. Se rascó la mejilla ante su pregunta - Yo ni siquiera sabía que estudiabas en UCLA - comentó. Era cierto, había perdido el contacto con él hacía casi un año, por nada en especial, simplemente poco a poco dejaron de hablar hasta que ya no tuvieron nada que decirse. Pero a pesar de eso se notaba que ambos estaban cómodos con la presencia del otro - He estado bien, por fin soy libre, estoy en la mejor fraternidad - dijo sonriendo al recordar a sus hermanas, sí, las Sigmas eran las mejores, nadie iba a hacerle cambiar de opinión. Se encogió de hombros - Vamos que no me puedo quejar - sonrió con dulzura y le dirigió una breve mirada al cielo. Tenía toda la pinta de que iba a diluviar - ¿Y tú qué tal? ¿Cómo es que has acabado estudiando aquí? - le preguntó con curiosidad. Dirigió una mirada a su alrededor. Mierda, no sé donde demonios estoy. Bueno seguro que Blake sabe volver se tranquilizó a si misma ante ese pensamiento. Sintió que algo frío mojaba su nariz. Instintivamente miró al cielo y comenzó a diluviar. Se empapó en segundos. Chasqueó la lengua molesta. Se dirigió al árbol más cercano y apoyó su espalda en el tronco. Ya no se mojaba. Suspiró, ahora solamente tendrían que esperar a que dejase de llover. Se miró a si misma y maldijo haber elegido una camiseta blanca, ahora era como si no llevara nada, ya que se transparentaba todo. Sus pantalones se pegaban totalmente a su cuerpo y su cabello no paraba de gotear - Maldita lluvia - dijo molesta. Dirigió una mirada molesta al cielo.

June tenía que reconocer que el chico sin camiseta y todo mojado tenía su punto. Se enorgullecía de que fuera su ex. Se recriminó a si misma por esos pensamientos y por mirarlo de esa forma los exs no se tocan se recordó mientras desviaba la mirada y se quedaba con la vista fija en el cielo - Eres tan halagador como creído - se burló. Se pasó una mano por la frente al ver lo que hacía pero no pudo evitar reírse. Sí, por eso se fijó en él, porque hacía tonterías que le hacían reírse hasta que le dolía el estómago. Con Ryder reía mucho menos. Suspiró y sacudió la cabeza para alejar esos pensamientos. Escuchó con atención las palabras que salieron de la boca de Blake entre sorprendida y admirada por que el chico se hubiese independizado. No se le escapó la mirada que él le dirigió a su camisa empapada. Rodó los ojos, sí era el mismo Blake de siempre - ¿En serio? Me alegro mucho por ti - le sonrió con amplitud, había vuelto a mirarle - Te envidio, yo soy demasiado cría como para atreverme a independizarme de mis padres - comentó y un suspiro se escapó de entre sus labios. Al fin y al cabo solamente era una cría de la alta sociedad que no sabía vivir sin el dinero de su padre. Se avergonzaba de si misma por eso. Asintió cuando hizo referencia a su fraternidad - Es lo mejor que me ha pasado en la vida - dijo con sinceridad. Se sorprendió un poco al escuchar que él era Epsilon. Cuando entró en la universidad tenía ciertos prejuicios con ellos pero el viaje a Haití cambió eso - Sí, te pega ser Epsilon, caballeroso pero presumido - dijo sacándole la lengua de forma traviesa. Le sonrió cuando él llegó junto a ella bajo ese árbol - ¿Por qué has tardado tanto? Te vas a poner malo - le dijo y le pellizcó la mejilla como si fuera su madre. Ante su comentario sobre la ropa interior la chica no pudo evitar ponerse roja, instintivamente se cruzó de brazos tapando la zona de su pecho - Pervertido - masculló aún avergonzada por su comentario. Sí, él había visto eso y más pero eso no quitaba que no le diera algo de vergüenza que la hubiese mirado tan directamente. A veces June no era más que una cría de diecinueve años con problemas para comportarse con los chicos. Luego él se sacudió como un perro y ella no pudo evitar negar con la cabeza. Se sorprendió por sus palabras - No, Blake no me jodas. Tú tienes que saber volver - y empezaba a entrar en la histeria - Estamos perdidos, vamos a morir de una forma lenta y dolorosa - la chica se había llevado ambas manos a la cabeza y estaba alzando la voz. Sí, June había perdido el control. Lo miró y le hizo un puchero - Dime que es una broma - dijo preocupada por cómo demonios volverían al lago.

Le miró enfurruñada por su comentario pero se relajó cuando le acarició la mejilla. Después de todo era incapaz de enfadarse con Blake. Se pasó una mano por el pelo, preocupada y medio histérica por no saber volver - Menudo par estamos hechos, los dos perdidos - dijo soltando una carcajada. Tenía que reconocer que la situación tenía su gracia. Asintió ante sus palabras, ya algo más calmada. Vale confiaba en él pero seguían estando perdidos. Mirándole el lado bueno, podría haber sido peor, me podía haber perdido sola pensó ya más calmada y se grabó a fuego la idea de no volver a ir al bosque. Por suerte ya no estaba diluviando aunque ella estaba ya helada. Inconscientemente se abrazó a si misma, frotándose los brazos, tratando de calentarse mientras Blake parecía intentar averiguar el camino. De repente el chico reaccionó, la cogió de la mano y empezó a correr, ella le siguió el ritmo - ¿En serio ya sabes ir? - le preguntó ilusionada y aliviada. Ya empezaba a pensar que le tocaría dormir ahí. Habían dos caminos para tomar y Blake pareció dudar. A la rubia ese camino no le sonaba para nada, seguramente porque ella había ido por otro lado o porque tenía tan mala memoria que ni siquiera sabía reconocer por donde había ido. Al final fueron por el izquierdo, el chico andaba más tranquilo y ella caminaba observando todo a su alrededor, tenía que reconocer que el bosque era un lugar precioso. Y con la lluvia los olores se habían intensificada, algo que le hizo sonreír, adoraba el olor de la naturaleza. Vio cómo él tomaba una foto y asintió por lo que dijo. Ya estaba mucho más tranquila, su ataque de histeria había quedado en el olvido y sabía que era gracias a él. Alzó la mano que Blake aún sujetaba por la muñeca y le tocó el hombro para llamar su atención - Gracias por lo de antes, casi pierdo los nervios - dijo y le sonrió con amplitud. Estaba algo avergonzada por su actitud de momentos atrás. Porque June odiaba actuar como una cría que perdía el control a la primera de cambio. Entrecerró los ojos - Creo que sí veo el lago - dijo señalando al frente con su mano libre - Ha sido un placer perderme contigo - comentó riendo mientras aceleraba el paso. Estaba deseando darse una ducha caliente y cambiarse de ropa. Volvió a mirar su ropa - Dios espero que no haya mucha gente por el lago - dijo algo avergonzada porque su camiseta parecía una segunda piel y los pantalones se le pegaban completamente.