Cabaña 1 ll Llegada

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Amaba que las vacaciones hubieran comenzado, ya que la escuela me había absorbido demasiado, llegando a ocasionarme cansancio extremo y unos dolores de cabeza que eran prácticamente insoportables. Y, mientras mis planes eran pasar las vacaciones en Londres, quizás en Francia, todos comenzaron a hablar del viaje al lago que se estaba promocionando. En realidad no era mi primera opción, ni siquiera la segunda o la tercera, pero mientras mis amigos estuvieran por ahí, seguramente todo iría mejor. Además, odiaba el tener que visitar tiendas donde no podía medirme la ropa por la pequeña panza que comenzaba a ya no ser tan pequeña. Casi cinco meses y ya se notaba bastante. Sin embargo, nunca llegué pasar por el drama ‘’estoy gorda y nadie me quiere. Quizás solo una vez, cuando el embarazo comenzó, pero el pequeño Jimmy, porque todo parecía indicar que era un niño, según el doctor, me hacía tanta ilusión que no importaba mi vientre abultado.

Lo curioso de todo, es que aun no se movía, o al menos yo aún no sentía que se moviera, así que no era raro el estar al menos dos horas en silencio, algo increíble en mi, y sin movimiento esperando a sentir algo, pero nada. Sin embargo, los latidos del bebé era completamente perfectos, y el sonido más hermoso que había escuchado en mi vida. Así que el doctor dijo que solo podía ser un bebé ligeramente flojo, cosa que me hizo mirar mal a Ethan y decir ‘’ Es por tu culpa’’, aunque ambos éramos activos, pero a alguien tenía que culpar. – Si, wohu – dije sin demasiada emoción. Compartíamos cabaña con el mono mayor, o mejor dicho, el pulgoso mayor. ¿Qué podía tener de bueno? Pero tenía que ver el lado positivo, así que abracé a Ethan después de ver las maletas volar y rodeé su cuello con mis brazos, acercando mis labios a los suyos con un poco de dificultad por el vientre entre nosotros – Lamento por los que pidan la habitación de al lado -

Para este verano tenía muchos planes, y parte de esos planes era pasar mis vacaciones junto a Jackson en algún rinconcito de europa donde podría él también conocer mi mundo. Estaba convencida que con el tiempo le gustaría, sin embargo, la gente de la universidad había organizado un viaje de verano en un enorme lago de Washington al que jamás había ido antes. La verdad es que un lago no era mi lugar preferido para vacacionar antes de que me escapara junto a Jackson luego del terrible incidente que tuve en las vegas, por lo que se me ocurrió el sitio que habían elegido no estaría tan mal mezclado con todo aquello que yo habituaba tener, así todos estaríamos contentos, Jackson tendría a sus amigos al lado, y podría convivir con nosotros al mismo tiempo, y por el otro lado, Kassandra, Ethan, Mía, Jack y Jake podrían ver de una buena vez que Jackson no tenía nada de malo, y por fin mis amigos y mi novio podrían llevarse de las mil maravillas. Era un plan excelente, no tenía por qué salir mal, después de todo teníamos toda clase de diversiones al alcance y sabía que a Jacko le gustaba el lago, pues ya habíamos disfrutado de uno antes.

-Vaya! Que adorable cabaña! – comenté entusiasmada quitándome los lentes de sol para engancharlos en mi polera cuando ya habíamos llegado al lugar. Llevaba a Jackson tomado de la mano e intentaba parecer entusiasmada con la esperanza de contagiarle mi felicidad – No te parece encantadora?, Hasta tenemos X-box! Podríamos tener alguna batalla de grupos con el dance central o el just dance más noche! – me reí, sabía que eso le entusiasmaría, pues a él le encantaban los videojuegos, era una cosa que m había transmitido.

Outfit :

El viaje fue aún más largo de lo que me imagine, me mantenía en silencio simplemente aferrado a mis juegos de celular intentando dejar pasar de lado o no pensar en el hecho de que me encontraba sobre un avión privado de los White, jamás me imagine estar en aquella situación menos rodeado de su grupito. Beverly parecía bastante entusiasmada con la idea del viaje junto a sus amigos y parecer sincero era la única razón por la que me encontraba allí en ese momento, no estaba en la mejor época para intentar amigarme por así decirlo con su círculo cercano, tenía muchas cosas en la cabeza, asuntos familiares o éticos sin resolver que me ponían de mal humor en cuestión de segundos solo recordando la anterior conversación con Melania, que al parecer se las había ingeniado para poder registrarse en la cabaña que habían elegido los amigos de la Barbie, era obvio que las intenciones de la Sigma era charlar sobre lo que había pasado pero para ser sincero no tenía idea de que decir frente a ella, tenía demasiados lados éticos encontrados por lo que no podía tomar una decisión o siquiera comentarlo con mis personas cercana siquiera con mi pareja.

Al llegar a la cabaña simplemente entre en silencio observando el lugar, si prefería mil veces estar en una de las cabañas baratas con mis amigos que con ellos en aquel montón de comodidades pero aun así no comente nada para no empezar una discusión, seguí a Beverly que me mostraba emocionaba las consolas de videojuegos, al escuchar a Kassandra hablar sobre su vida sexual en su habitación produjo que hiciera una mueca de asco mirando luego a mi rubia, sin duda me alejaría lo más que se podía de esa habitación- Si genial – Le comente sin mucho animo a la Barbie cuando escuchaba sus planes sobre jugar en la noche, mi mirada rodeo el lugar en busca de la zona de habitación pensando que de seguro se encontraba al final del pasillo – Iré a buscar una habitación para nosotros – Le dije sin prestar atención al resto caminando decidido hasta el fondo encontrando la habitación más lejana para sacarme la mochila de la espalda y dejarla sobre la cama.

Mi idea para las vacaciones de verano solía ser Europa, Hawaii y L.A., en algunos sitios de vacaciones y en otros simplemente trabajando. Sin embargo, se había organizado un viaje a un lago cerca de Washington y me apetecía ir. Hacía mucho que no salía con mis amigos de la UCLA, pues entre la época que pasé con una beca en NYC y los exámenes finales, no había tenido mucho tiempo libre... Así que había decidido que me apuntaría a aquel viaje con mis amigos. La idea era relajarse y disfrutar del verano.

El viaje fue un poco largo, pero bastante tranquilo. Llegué en avión, como el resto. Tenía buenas vibraciones con respecto a ese viaje, y cuando llegamos al lago y vimos nuestra cabaña estas vibraciones fueron a mejor. La casa era estupenda, perfecta para nosotros. Moderna, lujosa y espaciosa. - Así sí - exclamé sonriente. Ví cómo Kass y Ethan escogieron habitación y vi que Jackson iba a buscar una para él y Beverly. Así que decidí que tenía que escoger habitación cuanto antes si quería tenerla alejada de aquellas las parejas, pues me podría imaginar cómo pasarían las vacaciones... En cuanto llevé las maletas a la habitación elegida, volví junto al grupo.

Estas sin dudas no eran exactamente mis vacaciones ideales, la naturaleza y yo no éramos exactamente amigas intimas, a pesar de los lujos de la cabaña que habíamos reservado seguía prefiriendo mil veces un hotel cinco estrellas. El viaje había sido bastante divertido, a pesar de las diferencias que habíamos tenido rojos y rosas últimamente todo parecía volver lentamente a la armonía natural. Sinceramente el viaje me entusiasmaba iba a poder pasar mas tiempo con Jake, cosa que en verdad me agradaba, a pesar que había sido complice de que mis zapatos preferidos hayan acabado en los pies de una indigente. Habíamos llegado ya al lago, y tras darl dos de mis cinco maletas a Jake camine hacia la cabaña con las otras tes maletas y el bolso de mano junto a él.

-Esperen a llegar al cuarto. Reprendí al matrimonio que llevaba un año en su noche de bodas a penas puse un pie en la cabaña y los vi pegados como garrapatas. Tal como lo habían dicho en la agencia de turismo la cabaña contaba con muchos lujos y comodidades. -Me arrepiento de no traer a mis mascotas. Fingí inocencia, no solo lo decía por mis cuatro perros sino por el novio de mi amiga. Ok, esto terminaría mal, lo mejor sería ignorar su presencia y solo defenderme en caso que sea necesario, pero solo lo había por Beverly por nadie mas. Deje mis maletas en el suelo y me quite los lentes de sol. -No es un hotel cinco estrellas de Europa pero no esta mal.  Dije recorriendo con la mirada el lugar.

Mi palabra favorita "vacaciones" acompañado con "la mujer que te gusta", ya no era una palabra era una frase completa que lo complementaba el estar con mis amigos y un mono, realmente el lider mono estaba en una cabaña junto al lider de los epsilon y la lider de las alphas? la verdad es que no le habia creido mucho a Mía cuando me habia comentado aquello, pero no importaba. El viaje habia sido bastante relajante, a pesar de los ultimos acontecimientos entre epsilon y alphas, la broma de ella contra nosotros y bueno nuestra venganza. Le recibi las dos maletas que Mía me habia pedido que le ayudara a cargar para luego entrar.

Al entrar a la cabaña segui derecho, queria encontrar una habitacion, dejar las maletas y luego si saludar a todos y eso fue lo que hice, deje las dos maletas de Mía en el cuarto y una mia que llevaba colgada en mis hombros, al poner todo en nuestra habitacion salí y mire a Ethan y Kass que estaban pegados como de constumbre, al caminar hacia Mía no pude evitar darle un zape a Ethan para que se separara, llegue a donde estaba Mía y le di un pequeño beso en sus labios para luego sonreir. Levante mi mano en forma de saludo a Beverly y a Jack, el mono o Jackson me lo habia topado cuando fui a buscar un cuarto pero con el no cruce palabras. - Esta buena esta cabaña, agradable para ser verdad

Había llegado después de no sé cuantas horas en un autobus, era lo que había necesitado para sentirme tranquila y más relajada, aunque también cansada. Ir varias horas sentada no ayudaba a descansar pero lo haría una vez que estuviera en la cabaña para poder tumbarme frente a la fogata con un cafe o algo así y un libro o cualquier cosa que me distrajera. Llegué al lugar y no se veía nada mal aunque para ser sincera no sabía ni con quien me tocaba, me habían dado opciones pero solo pedí la primer que tuviera espacio así que aqui estaba esperando ver con quienes me tocaba (?).

Entré en la cabaña y vi a una pareja bastante entretenida, como no reconocerlos? :roll:eran la pareja más conocida, después vi a Mia con Jake y finalmente vi a Beverly... momento Beverly?? -Es en serio? -pregunte en un susurro a mi misma. No era por ella, sino quien venía con ella y lo decubrí cuando regresaba de una de las habitaciones. Me mordí el labio, si hubieraa sabido que él estaba en esta cabaña hubiera buscado otra o simplemente no habría hecho el viaje.
-Hola -salude a todos y nadie en especial -Aun quedan habitaciones? -pregunté pensando que si eran 3 parejas (genial, y a parte en parejas, podía el mundo estar más en mi contra en este momento?) lo más probable es que quedaran una o dos vacías. Arrastré mi maleta hacia las habitaciones pasando de las parejas y de Jacko, en busca de una libre y la encontré entre 2 que ya estaban dadas, entonces me metí y no quería ser grosera así que dejé la puerta abierta y me tumbé en la cama. Habría otra cabaña con habitaciones disponibles? Me quedé mirando el techo escuchando las voces del resto que estaría en la cabaña.

Miré a mi marido con un gesto que claramente decía ''sabes perfectamente que no será así'', ambos lo sabíamos, pero era interesante fingir que podíamos pasar mas de 24 horas separados el uno del otro, menos aún cuando mis hormonas se encontraban a la orden del día, tan revolucionadas como nunca podrían haber estado. Así que, cuando Beverly llegó con el pulgo... jackson, no me molesté en separarme de Ethan, hasta que el señor yo-soy-odioso-y-todo-aquel-que-no-tenga-pulgas-me-cae-mal logró hacer que se rompiera la magia - Serán unas vacaciones hermosas - mi emoción era casi tanta como cuando Harry se enteró que era un horrocrux. Dios, tenía que alejarme de cualquier fic de Harry Potter o terminaría por ponerle a mi hijo Remus OrejadeFred White.

Miré de mala manera a Mía, sabiendo perfectamente que los comentarios estarían a la orden del día - Si yo fuera tu, no dormiría sin tapones de oídos - le saqué la lengua infantilmente y me senté al lado de Ethan, o mejor dicho, me acosté a su lado en el sofá; ¿Por qué nadie me había dicho que cargar un vientre sería tan dificil? Apenas Ethan mencionó el Whisky mi emoción bajó aun más; el alcohol y yo habíanmos tenido que tomarnos un tiempo, no era él, era yo. Sentí como mi estómago gruñía con un extraño movimiento por las ganas de beber un poco por lo menos, pero... eso no era un antojo.

Ignoré por completo a todos durante un instante, poniendo una mano en mi vientre mientras veía como Mía y Jake parecían una pareja agradable, genial, mi amiga merecía a alguien que la hiciera feliz, o por lo menos que pudiera controlar ese carácter, y si jake era la persona para ella, yo les apoyaría sin importar que hubiesen tomado un break. - Jack, ¿Qué tal si le traes unas galletas a tu embarazada favorita? - pedí con un puchero, nuevamente sintiendo aquella extraña sensación, ahora con mis manos - oh my god! - comprendí despues de un instante - creo que se movió - era extraño, demasiado extraño, y definitivamente jamás hubiera estado preparada para eso. - JACK! tu sobrino pide galletas, y se esta moviendo para obtenerlas, así que apúrate - Si, tenía un maravilloso humor. - Amor, va a ser futbolista - suspiré con cansancio aun con las manos en mi vientre, más precisamente en el lugar donde dolía un poco. Solo esperaba que no fuese tan hiperactivo como el padre.

Sonreí falsamente a Kass ante su sugerencia para poder dormir, aunque sin dudas la tendría mas que presente, aunque siendo ellos tendría que usarlos las 24 horas. Ethan había captado perfectamente mi comentario, no me extrañaba, eramos amigos desde pequeños, me conocía. -Espero que esos animales no sean demasiado salvajes. Dije con total naturalidad mientras llevaba el resto de mi equipaje a la habitación que había ocupado Jake regresando justo a tiempo para oír la pregunta del rey toro. -Mmm, yo creo que dejare el alcohol para luego e ire a bañarme. Mía Crawford y sus manías, sin impoortar la duración de un viaje siempre debía bañarme al llegar. -Y antes que cualquiera de sus mentes pervertidas lo insinuen, no, no es una invitación de ningún tipo. Les guiñe un ojo en general.

Cuando creí que ya estabamos todos los ocupantes de la cabaña llego alguien mas, a quien no conocía y llego justo antes que me vaya a mi habitación a ducharme. Ethan intento, fallidamente porque ya se habia ido a una habitación, emparejarla con Jack.. -Ethan eres pésimo como cúpido, se del tema. Ok, el no me había emparejado con nadie, pero me divertía culparlo a él por mis desgracias. Miré hacia el pasillo de las habitaciones viendo si regresaban ella o el simio pero no, al parecer sociabilizar no era lo de ellos. Pero los quejidos de mi hermana rosa, que se habían hecho rutina, me quitaron de mis pensamientos. -¡Omg! ¿Mini Kasseth se esta moviendo y tú aún no le avisas a las chicas? Ok, en caso de avisarles en cuestion de segundos habría una invasión rosa en la cabaña del amor.

Mi enorme sonrisa se esfumó junto con Jackson por el pasillo. Suspiré llevándome una mano a los ojos mientras que Jake y Mía entraban por el pasillo acompañados por Jack Glimburry. Tomé asiento en una de las sillas del comedor contemplando como todos reían y molestaban a Kasseth por simplemente ser ellos, y de pronto sentí muchas ganas de unirme, pues bulliar a Kass y Ethan siempre me gustó mucho, bueno, la verdad es que más a Ethan que a Kass, pero no podía. Era como si me encontrara dividida, y de pronto el comentario de Mía sobre las mascotas hizo que cambiara drásticamente mi mirada a una de puro reproche hacia la morena. – Pensé que habíamos quedado en que al menos lo intentarías – modulé con la boca buscando su atención para no sonar audible, quería matarla y daba gracias al cielo por que al menos Jackson no estaba allí. Negué con la cabeza molesta, me paré y me perdí por el
pasillo tras él.

Al llegar a la habitación le aborde por la espalda abrazandole y besando su oreja – Hey! ¿Quieres que vayamos a dar un paseo? – pregunté meciendo mi mejilla por su oreja como si fuera un gato – podríamos rememorar algunos buenos momento de aquel viaje que tuvimos al norte de california – mi mirada se volvió traviesa y divertida busqué sus ojos.

Sabía que el ambiente no sería el mejor desde el momento que Beverly me había comentado que quería que viniera con sus amigos, mi idea de unas vacaciones era sentirme cómodo, reír, no preocuparme de nada, pero en cambio estaba metido en la cueva de la Elite de UCLA además junto a la chica que aparentemente era mi media hermana con la cual no había tenido contacto desde aquel día que le había pedido que se marchara, realmente iba a ser un martirio aquel viaje pero lo hacía solo para satisfacer los deseos de la Barbie que parecía bastante entusiasmada. Una vez en la protección de la que sería nuestra habitación me saque mi calzado para buscar ponerme algo cómodo para estar en el lago, al menos un short con unas sandalias, por lo que estire mis manos hacia mi mochila que ahora estaba en la cama para abrirla, fue cuando sentí como los brazos de mi novia me rodeaban con cariño besando también me oreja que me hizo sentir un tipo de escalofrió seguido de una sonrisa que no llego del todo a mis ojos- Claro suena bien – Comente en susurro girando mi rostro a verle sonriendo lo mejor que podía sintiendo al mismo tiempo su cariño, ella se esforzaba por hacerme sentir bien, al menos era algo que tenía que reconocer.

Sus palabras me hicieron recordar nuestros momento en el lago, así que solo acepte con la cabeza – Vamos pero antes me pondré cómodo – Le dije alejándome con suavidad de sus brazo para sacar mi pantalón rápidamente colocándome un bañador sobre mi bóxer además sacando mi calzado escuchando la conversaciones que habían tras la puerta algo lejos. Una vez listo no me retrase más, pues feliz me alejaba de aquella cabaña lo más rápido posible. Tome la mano de la rubia para salir de allí con destino al lago o cualquier lugar interesante que me ocupara la mente.